En nuestro sitio web, una serie de fotografías captura momentos de interacción silenciosa entre una joven y las esculturas de "Le Pietre di San Giorgio". Estas imágenes no son simples retratos; son ventanas que se abren a un diálogo continuo entre el arte y el territorio que lo rodea. Las esculturas, profundamente arraigadas en la tierra siciliana, emergen no solo como monumentos, sino como seres vivos que participan activamente en la vida cotidiana de la comunidad. Las obras de Nicola Dell'Erba son más que simples expresiones artísticas; son puentes que unen a las personas con su entorno, invitando a reflexiones que resuenan con la frase de Leonardo Sciascia: "Cada lugar es un mundo". Las esculturas se integran en el paisaje urbano y natural, convirtiéndose en parte integral de la vida cotidiana, dando testimonio de historias, culturas y cambios.
Gesualdo Bufalino escribió que «La memoria es el único paraíso del que no podemos ser expulsados». Las obras de Dell'Erba, moldeadas por la tierra y la historia, custodian esta memoria, en diálogo con quienes las observan. Ofrecen una sensación de continuidad con el pasado, a la vez que invitan al espectador a reflexionar sobre su papel en la vida moderna. Estas esculturas, por tanto, no son simplemente objetos para contemplar; participan activamente en el entorno que habitan. Invitan al espectador a una comprensión más profunda de sus raíces y su lugar en el mundo. De este modo, el arte de Dell'Erba no solo embellece el espacio físico, sino que también enriquece el espacio interior de quienes las contemplan, haciéndose eco de otra reflexión de Bufalino: «La verdad de este mundo está en el doble». Descubra más y deje que el arte de «Le Pietre di San Giorgio» le hable también a usted.